EL FESTIVAL INTERNACIONAL MERIDIANO CERO PREPARA SU PRIMERA EDICIÓN

Caspe acoge del 27 al 30 de septiembre la primera edición del festival internacional de teatro amateur contemporáneo dirigido por Marián Pueo

El festival internacional de teatro amateur contemporáneo Meridiano Cero se celebrará del 27 al 30 de septiembre en Caspe, organizado por la compañía zaragozana Teatro Che y Moche y patrocinado por el Ayuntamiento de Caspe y el Gobierno de Aragón.

El festival forma parte del proyecto de residencia de la Compañía Teatro Che y Moche en Caspe, que fue aprobado oficialmente en mayo de 2007 por el Centro Dramático de Aragón. La compañía ya mantenía un estrecho vínculo teatral con Caspe a través de la producción y dirección artística y técnica del Compromiso de Caspe.

Al festival acuden grupos con diferentes propuestas y de distintos lugares: Calandraca, de Elche, Teatre El Mirall, de Blanes, Gerona, En Azul Producciones, de Sevilla. Terrateatre, de Italia y Das Dokumentartheater, de Berlín.

Habrá mesas redondas y coloquios sobre los espectáculos, el teatro amateur y los festivales. Por su parte, el grupo de Caspe Bailío, dirigido por Ismael Crespo, se encargará de recibir a los espectadores en el teatro antes de cada actuación. Además, Ingrid Magriñá y David Ardid se encargarán de impartir talleres de cuerpo y movimiento y humor gestual, respectivamente. Por las noches, tras el espectáculo habrá un espacio alternativo en el que, además de lo programado, se dejará un lugar para interveciones espontáneas.

Para Teatro Che y Moche, el festival “es una buena oportunidad para conocer el circuito de festivales de teatro amateur, además de compartir e intercambiar experiencias y, sobre todo, se trata de aprovechar el interés y la implicación que hay en Caspe a la hora de hacer teatro y convertirlo en interés como espectadores”. Para Marián Pueo, directora del festival, “se trata de crear público a partir de distintas propuestas que muestran una visión muy diferente del teatro contemporáneo. Por eso hay una apuesta por la visión personal y el apoyo a nuevos autores en las obras seleccionadas”. “El objetivo último del festival -aclara Marián Pueo- es legitimizar el teatro aficionado quitando la carga negativa de aficionado y sustituirla por el adjetivo amateur”.